–
¡Eras casi tú!
Era casi tu pelo, casi tu risa.
–
Casi nos encontramos
–
Casi en la misma esquina,
Casi al mismo tiempo.
–
¡Eras tú!
Estoy seguro,
–
…casi seguro.
“Le quiero señorita”, susurró Juan
desde su puesto habitual en el equipo 16.
–
“Veme en Face book”
Pareció susurrarle ella camino al 22.
–
“Es que no tengo,
siquiera correo se usar”
Pensó decir.
–
Día a día simulando, torpemente tecleaba sin conexión,
esperando ver pasar la chica del 22.
–
“Twiteame al menos, tu me gustas también ”
Esta vez, claramente en sus labios leyó.
–
Labios rebeldes que frente a él
se resistían a seguir el escorzo de su silueta.
–
¡Twiteame!
–
Brotó del silencio frente al equipo 16
El erguido y extasiado, soltó el mouse
–
¡TE QUIERO NIÑA MIA, SIEMPRE TE HE QUERIDO!
–
Vencido todo pudor.
Rompiendo sintético silencio.
En voz alta la tuteó.
–
Ante tal abismo comunicacional
ella desistió del Chat y del Blog.
–
Sin volver a cruzar mirada
Cerró toda ventana
Y se marchó.